OPINIÓN
DESAPARICIONES FORZADAS EN MÉXICO: una herida que no sanará
El pasado 4 de junio, la Policía Ministerial de Guadalajara a las afueras de la Fiscalía General del Estado de Jalisco, detuvo a 30 jóvenes, en medio de las protestas por la muerte de Giovanni López. Durante 48 horas se desconoció su paradero, hasta que la presión de amigos, conocidos, padres de familia y la sociedad en redes sociales, lograron regresarlos sanos y salvos a sus casas. Un caso más de desaparición forzada que causa indignación en el país.
La desaparición forzada es la detención, arresto, secuestro o privación de la libertad, por parte de agentes del Estado o particulares con autorización o apoyo del aparato del Estado. Se trata de una actitud multi violatoria de derechos humanos:
- Se viola el derecho a la libertad. Al detener a la persona y no entregarla inmediatamente a la autoridad correspondiente. Los agentes deciden “llevarlo de paseo”, “darle una calentadita”, torturarlo, entre otras prácticas, negando su acceso a la libertad.
- Se violan el derecho a la verdad y acceso a la información, a los familiares, puesto que la autoridad o los particulares con ayuda del estado, niegan la comisión del delito o se abstienen de dar información del paradero del individuo.
- Se vulnera el derecho a la vida. Pues aunque la desaparición sea parcial o no siempre termine con la muerte, la acción vulnera la dignidad e integridad de la persona.
Los orígenes de la desaparición forzada obligan remontarse a los movimientos estudiantiles de 1968. Durante meses en un trabajo conjunto de la Dirección Federal de Seguridad, el cuerpo de granaderos y el ejército mexicano, donde además de perpetrar la “Matanza de Tlatelolco”, se orquestó una desaparición de centenas de jóvenesa manos del Estado.
No obstante, el primer caso oficial del que se tiene registro de desaparición forzada, en México, es el de Epifanio Avilés Rojas en 1969, detenido por el ejército y llevado al campo militar #1 de la Ciudad de México. El pasado 19 de mayo, se cumplieron 51 años de su desaparición.
El caso de mayor indignación, en la actualidad, se trata de la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, a manos del CISEN, el Batallón 27 de Infantería, Policía Federal y Estatal de Guerrero y la Policía Municipal de Iguala, lugar donde fueron desaparecidos.
De acuerdo con la Comisión Nacional de Búsqueda, hasta enero de 2019 en México, habían 40,180 desaparecidos en el país.
La desaparición forzada en México es una herida social que se mantiene abierta y solo comenzará a subsanarse, cuando el Gobierno reconozca su participación directa e indirecta en la desaparición de sus ciudadanos.
