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hace 5 años,el
Por
Chava AlcalaHace trece años ingresé al servicio público, con dos ideas claras: ayudar siempre a los demás y, hacer una carrera profesional con ética y valores.
Estas dos ideas me han definido, me siento orgulloso de las metas alcanzadas, mismas que logré sin sacrificar mis ideales personales y políticos, sin embargo, tengo que decirlo, he tomado algunas decisiones que, a la vista de muchos, no son tan populares, pero no me arrepiento de ello.
El poder es difícil, ¿por ejemplo? Les puedo confesar que una de las cosas más cansadas es la adulación que surge de la propia actividad política.
Es cansado también, porque fuera del gobierno existe gente cambiando las reglas, pensando fuera de la caja (out the box), rompiendo paradigmas y haciendo que las cosas sucedan.
Quiero dedicar esta columna precisamente a ellos, a quienes rompen paradigmas, un joven que sin pertenecer a nuestro país trae la camiseta de México bien puesta, un joven que se preocupa porque dejar un país mejor. Este joven y muchos otros, tienen hambre y fe de cambiar a México, esa hambre que yo en algún momento llegue a sentir y que el propio oficio -hay que decirlo- hace que se nos olvide.
Pero justo cuando parece que ese ímpetu se va perdiendo, llegan jóvenes, adultos o ancianos que, con su entusiasmo y actitud propositiva, me hacen pisar firme. Esta columna está dedicada a todos los que entienden que el dinero no es la recompensa al final de la carrera, a quienes tienen la satisfacción del deber cumplido, de poner su esfuerzo y pasión a lo que hacen.
Este joven entusiasta del que les hablo es Fer Alonso, lo conozco hace muchos años, cuando comenzó a trabajar conmigo en la iniciativa privada, después de ese emprendimiento separamos caminos, pero nunca deje de reconocer y mantener contacto con aquél joven echado hacia adelante y acomedido. Fer tiene una asociación dedicada a promover que la gente que fuma no tire colillas en las calles, esas colillas tan dañinas para el medio ambiente, su iniciativa ha tenido un efecto multiplicador, bien dicen que el ejemplo arrastra, me sorprende ver cuantos empresarios, gobiernos y jóvenes se han convencido y sumado a esta iniciativa para no tirar colillas en las calles.
Fer Alonso es una persona que promueve a sus amigos, que comparte publicaciones y las buenas actitudes en redes sociales, ¿debemos rodearnos de gente así?
¡Gracias Fer, por demostrarnos que no es necesario nacer en Aguascalientes y en México para cuidar a este país, espero que más jóvenes te sigan, cuenta siempre con un servidor!
Los invito a seguirlo en sus redes sociales: Facebook: 5colillas.