Morelia, Michoacán.- Dos marchas juveniles por el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo Rodríguez, el 1 de noviembre de 2025, derivaron en disturbios este martes 4 de noviembre en el centro de Morelia, con encapuchados rompiendo vallas y policías respondiendo con gas lacrimógeno y balas de goma.
El jaloneo, que duró de 1 a 4 p.m., siguió a la protesta del domingo 2 de noviembre con 2 mil asistentes exigiendo justicia y que también concluyeron con disturbios y 8 detenidos.
La primera marcha, de estudiantes de la Facultad de Derecho de la UMSNH, partió de Plaza Jardín Morelos; la segunda, de normalistas y otras facultades, del monumento a Lázaro Cárdenas. Ambas convergieron en Palacio de Gobierno, rompiendo consignas pacíficas por la muerte de Manzo durante el Festival de Velas.
De la protesta de estudiantes de Derecho, los jóvenes se detuvieron frente al congreso de Michoacán, en donde dieron cuenta del hartazgo de las juventudes de vivir en un estado de violencia.
» La fuerza del movimiento no está en los gritos, está en la unión. No respondamos a provocaciones, que se escuche nuestra voz, no el ruido del caos. Nadie se queda atrás, nadie se separa, nadie cae en provocación. Cada paso que demos por la justicia no será por la violencia».
Al llegar a Palacio de Gobierno, comenzaron a reunirse más jjóvenes encapuchados. Las consignas pasaron a un jaloneo de las vallas que protegían el edificio de gobierno; usaron fierros para golpear la protección de aluminio en la puerta principal, confrontando a policías. Los agentes respondieron con gas lacrimógeno y balas de goma en dos momentos, replegando a la mayoría, pero dejando manifestantes que exigieron investigación seria y un estado de paz en Michoacán.
La manifestación de martes, con cientos de participantes, reflejó hartazgo por inseguridad, tras el asesinato del edil uruapense. Las protestas juveniles cruzan con demandas de seguridad.