Publicado
hace 9 meses,el
Compañeros, compañeras, en días recientes, diversos legisladores norteamericanos amenazaron a nuestra patria; no es la primera vez, con una intervención militar, tomando como pretexto el tema del narcotráfico y la violencia. Y subrayo, tomando como pretexto.
No es la primera vez. Donald Trump, en su momento, planteó cuando presidía el vecino país que pudiera ser los cárteles planteados como grupos narco terroristas. Y, con esta idea, que tiene el gobierno de Estados Unidos de súper policía, que no entiende dónde llegan sus fronteras, pretendería intervenir en nuestra patria para atacar a estos grupos criminales, supuestamente.
Aquí, a su derecha, tienen ustedes la distribución de droga en territorio de Estados Unidos; es el crecimiento, acá 2015, acá 2020, el crecimiento es exponencial. Es impresionante el número de grupos del crimen organizado que tienen en este momento el control del mercado de droga más importante del mundo.
Si ustedes revisan quiénes son los cárteles que, en territorio estadounidense, distribuyen la droga, es el cártel de Sinaloa, el cártel Jalisco Nueva Generación, el cártel del Golfo, la organización Beltrán Leyva, entre otros.
Esta información es de la DEA, no me la estoy inventando; de la Agencia de Drogas de Estados Unidos.
Yo pregunto: si el gobierno de Estados Unidos, quiere resolver el problema de la droga y su consumo ¿por qué no empieza en su territorio? Ahí está cómo estaban en 2015 y acá está cómo estaban en 2020. Si quiere utilizar a sus fuerzas armadas para enfrentar este flagelo, tiene un problema grandecito en toda la geografía de los Estados Unidos.
El comportamiento del gobierno de Estados Unidos es profundamente hipócrita. Porque, su pueblo, es el principal consumidor de droga y no lo atiende como un problema de salud pública y no se sabe quiénes son los grupos que distribuyen. Bueno, pues, ahí los tiene.
Mientras que, decía nuestra compañera, Secretaria General, Citlalli Hernández, de Morena, la semana pasada; tú piensas en Colombia, un narco, Pablo Escobar. Piensas en México, ‘Chapo’ Guzmán, con Genaro García Luna y Felipe del Sagrado Corazón de Jesús Calderón Hinojosa, de la mano.
Y Estados Unidos ¿quién? No se sabe de ningún grupo criminal. Cuando, evidentemente, existen y son mucho más poderosos económica, militar y políticamente que lo que tienen en nuestro país.
Rivapalacio, que nadie va a decir, con la venia del Presidente de Estados Unidos, dirás, porque estamos hablando de Estados Unidos.
Es una desvergüenza que, ustedes, justifiquen la intervención militar del ejército norteamericano. Son perfectas herederas y herederos de sus tatarabuelos que fueron a Europa a traer a Maximiliano, pidiéndoselo a Napoleón Tercero; que aplaudan, son unos desvergonzados. Yo no los iba a tocar. Pero son unos desvergonzados.
Están en contra de la militarización y militarizaron el país durante la usurpación de Felipe del Sagrado Corazón de Jesús Calderón Hinojosa que, hipócritamente, dijo que iba a combatir al narco y combatía a los grupos contrarios al grupo del ‘Chapo’ Guzmán.
Hoy, se quejan de la militarización del país, pero aplauden como focas, con todo respeto a las focas, aplauden que pueda intervenir el ejército norteamericano.
¡Qué clase de posición en contra de la militarización que se ponen de tapete frente al imperio de Estados Unidos! ¡Hipócritas! ¡Traidores al pueblo! ¡Vende patrias! Que quieren que venga el ejército de Estados Unidos a hacerles la tarea que, ustedes, no pueden hacer: derrotarnos políticamente en las urnas. ¡No pueden!
Y por eso quieren la intervención del gobierno de Estados Unidos. Esa es la pura verdad, eso es lo que está detrás, su posición golpista, su posición contraria al interés nacional.
Ni una sola fuerza política, ni una sola fuerza política del país, podría justificar la intervención militar de Estados Unidos a nuestra patria
Todos, al unísono, deberíamos alzar la voz repudiando estos intentos injerencistas. Me siento, nos sentimos profundamente orgullosos, profundamente honrados de que el compañero Presidente, López Obrador, haya rechazado tajante y enérgicamente la posibilidad de cualquier intervención militar o política del gobierno de Estados Unidos.
¡Grande! Hace mucho que no existía un presidente de la República que, con firmeza, con valor, con honestidad les dijera: ¡Aquí manda el pueblo de México! No somos colonia, no somos su patio trasero. Somos una nación independiente y soberana y tenemos Presidente y tenemos gobierno que nos representa con dignidad, con decoro, como hace mucho no había.
Se habían acostumbrado, en Estados Unidos, a tener empleados como el narco de Calderón o como la cabeza hueca de Fox o como Enrique Peña Nieto. Hoy, no es así.
Rivapalacio, que nadie va a decir que sea simpatizante nuestro, saca una columna el día de ayer, donde dice: el narcotráfico ha sido utilizado en Estados Unidos como una herramienta política y para control social. Y trae muestras de cómo se ha venido utilizando, perversamente, para, dice, Estados Unidos existe un doble lenguaje, cuando, combatir el narcotráfico se trata, donde los enemigos siempre están afuera y las víctimas adentro.
Es, efectivamente, gravísima la violencia; 30 por ciento se han incrementado los homicidios en Estados Unidos por el problema de la droga.
¡Ah! Pero quieren venir a intervenir nuestra patria. ¡Primero que pongan orden en la suya! ¡Primero que pacifiquen su país! ¡Primero que destierren el consumo de drogas que ellos, perversamente, promovieron desde la Segunda Guerra Mundial y que acentuaron en la Guerra de Vietnam!
He sostenido en esta tribuna y lo reitero, que el gobierno de Estados Unidos, decide qué grupo criminal le venda droga. Y sostengo que, no solo lavan dinero; sostengo que los dos motores de la economía de Estados Unidos son el dinero surgido de la venta de drogas y el dinero surgido de la venta de armas que usan los grupos criminales en México y en Estados Unidos.
Y, por eso, no hacen absolutamente nada para resolver de fondo este problema. Y sí lo usan como pretexto, para estar acosando a nuestras naciones.
10 mil millones de dólares les metieron a Colombia para la guerra contra el narco y, como también lo he dicho en esta tribuna, hoy se produce más cocaína y de mejor calidad. Le ha costado la vida a 800 mil colombianas y colombianas esa falsa guerra contra el narco.
Tengo aquí, finalmente, la lista de Money Inc., de los 20 narcotraficantes más importantes en fortuna del mundo. Seis son estadounidenses, aunque es cierto, que está aquí Al Capone, que ya, hace mucho, deberían actualizar esta lista. Seguramente están otros. Seis mil 700, o sea los 700 millones de dólares de García Luna, no pintan. Apenas compiten con los de Caro Quintero.
O sea, es una cosa menor para los que no ven pruebas de los vínculos. ¡Qué tierno! El ‘tomandante Borolas’, alias Felipe del Sagrado Corazón de Jesús Calderón Hinojosa, que tiene dudas sobre la sentencia en contra de García Luna, que no ha visto las pruebas de los 700 millones de dólares en propiedades.
Ahora ya pasó de que no sabía a tener dudas de la culpabilidad. Mientras tanto, el corrupto Poder Judicial de nuestra patria, le liberó las cuentas a la señora Carpinteyro, esposa de Genaro García Luna, unas horas después de que fuera encontrado culpable.
Cierro diciendo: ninguna fuerza política, que ya lo dije, debería validar la amenaza de intervención militar de Estados Unidos, en nuestra patria.
El desprecio absoluto de nuestro pueblo tendrá la fuerza política que suba a esta tribuna a validar una agresión contra nuestra independencia y nuestra soberanía nacional.
Cierro diciéndoles: el sábado, compañeras, compañeros de la oposición, van a ver dónde está el poder, de qué lado está el pueblo. Acompañaremos al compañero Presidente, López Obrador, en la Expropiación, en el aniversario de la Expropiación Petrolera y vamos a demostrar, una vez más, de qué lado está la fuerza popular frente a los rosados, la fuerza de nuestro pueblo.
¡Larga vida a nuestro movimiento y larga vida a nuestra independencia y a nuestra soberanía nacional!